Actualidad en el cuento de “La Casa”

Buenas.
Os escribo desde la piscina climatizada que he montado en mi casa.

(Foto tomada antes de climatizar la piscina)
Es que he estado mucho tiempo buscando la puerta para entrar en ella.
Y como no la encontraba decidí construirme un cobertizo para protegerme del frío. Al menos en Verano no lo he necesitado, ahora que viene el frío... Ya lo tengo construido.

(Ahí está el cobertizo. Con todo lo que se puede tener dentro, excepto internet, que cojo el de la Ciudad)
Además de eso... Pensé que llegaba el invierno y si quiero usar una piscina la tendré que climatizar. Pues ya está climatizada. Me he montado un bareto tapado también y me he ido al Mercadona a comprar bebida: Agua, batido de melón, batido de oreo, zumitos, y bueno, por si alguna me da por invitar a alguien que le guste esta, pienso, horrible y escandalosa mezcla, un poco de Red Bull y una botella de Brugal. Pero vamos, por si me decido algún día a inaugurar mi casa y puedo invitar a alguien con eso. Si no, agüita y batido para todos.
Así que aquí estoy, con el portátil, el Wifi de la ciudad, porque no he podido entrar a instalar internet, con un vaso de agua fresquito, unos cacahuetes en una colchoneta.
Cuando me canse de la piscina me vuelvo al cobertizo, que ahí me ha dado tiempo a contratar el Digital + y juega hoy el Madrid.
Pero creo que estoy deseando entrar en la pedazo de choza que me he construido y ver menos fútbol y dar más masajes. Mientras tanto, de esto me serviré. De una tele con fútbol, series y Fifa, de las croquetas de mi mama y de mi cama alta, todo instalado en el cobertizo.
Pero es que estoy un poco estresado buscando la puerta. Me voy a tomar un respiro. A veces dudo de si en la construcción la incluí. Pero no la tengo en los materiales restantes para montar, y tengo la factura del Leroy Merlín. Fue lo más caro. Lo recuerdo. Con una forma de luna en el centro y de color morado-fucsia-rosa-rosa fuerte-rojo fuerte. Llamad al color como queráis.
Pero aquí... hay truco. Debo haber construido sobre un terreno mágico. Especial. Es cierto que la casa se mueve. Pero tiene 4 paredes, copón.
No debe ser tan complicado. Aún así he decidido ir al ataque y buscarla una vez más.
Si aún así no la encuentro no me quedará otra que, sin desistir, tomarme un respiro. Un descanso. Una búsqueda más pausada. No fuera a ser que la puerta saliera sola. Cosa que no creo.
Sea como fuere. No pienso moverme de mis dominios.
¿Y sabéis qué?
Hay vida en la casa. Hay luz por la noche. Hay una pequeña sombra por la noche. Algo ha entrado a vivir en la casa de sus sueños y yo, que la he construido ¿no puedo? PERO ESTO QUE ÉEEEEEEEEEE!!!!!!!!!!
En fin. Vamos a trabajar en ese gran último intento antes del muy posible descanso.
Os contaré en el próximo capítulo.
Un saludo.
PD: Me salgo de la colchoneta de la piscina. Voy al cobertizo. A seguir pensando. Lo mismo recibo alguna visita de algún amigo, que quiera pensar conmigo. :)