Se acabó el comer de bien

Buenas.
Desde hoy se terminó el comer y cenar, llamémoslo, de buena manera (MADE IN CASA) en esta casa.
Y todo sea porque cada uno haga sus cosas!
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Hay cosas que son generales en una casa, como por ejemplo: COMIDA (para todos), LAVAR ROPA (de todos) PLANCHAR (ropa de todos), LIMPIEZA (para el bienestar de todos), etc…
En este caso como aquí no hay la necesidad de planchar y limpiar pues sólo queda COCINAR y LAVAR (con su tendido, doblez y recogida).
Pues bien, aquí cada uno hace lo que puede, siempre que pueda. Pero las cosas generales deberían anteponerse a las personales.
EJEMPLO: si no hay ropa limpia pues primero se pone la lavadora y luego te X, donde X puede ser: cortas las uñas.
Por lo tanto, si hay dos personas, una sabe cocinar y la otra no, cocinará quien sabe porque sabe y lo hará más deprisa que quien no sabe.
Si de esas dos personas una sabe hacer otra tarea general, por insignificante que pueda ser (AUNQUE SI ES GENERAL de insignificante poco) pues lo hará en detrimento de la otra porque no sabe.
He encontrado un artículo sobre la mujer moderna que es una verdad, desde mi punto de vista cercano, COMO UN TEMPLO.
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Las mujeres modernas pasan mucho tiempo en sus trabajos y fuera del hogar o con los niños, lo que las va alejando cada vez más de las cocinas...

Esto influye en los hábitos alimentarios. Son muy pocas las mujeres que llegan a su casa luego de un arduo día y se dedican a cocinar. Los envíos a domicilio, el freezer y el microondas, son sus mejores aliados.

Sus frigoríficos se ven plagadas de imanes con teléfonos de comida a domicilio.

Ya sea por trabajo o por cuidado de niños deciden dedicar el poco tiempo libre que tienen a otras tareas, quizá importantes, pero siempre antes que dedicarlo al arte de cocinar. La consigna es simplificar las cosas.

Las nuevas herramientas para la comida se ven ya en los supermercados, donde se vende toda clase de comida congelada que -con pocos minutos en el microondas- ya está lista para ser ingerida.

Existen también las mujeres a las que les encanta cocinar pero por tiempo no pueden. Muchas veces el cansancio es el problema más común para alejar a la mujer de la cocina. En realidad esas mujeres cocinan pero recurriendo a métodos más fáciles como el freezer y el microondas.

Menos obligaciones, más placer

Históricamente el rol de la mujer era la casa y sobre todo la cocina. Pero esto con el tiempo fue cambiando. La mujer tuvo la necesidad de salir a trabajar y fue delegando responsabilidades domésticas.

Ese tiempo perdido es mejor aprovecharlo para satisfacer los propios deseos y aspiraciones, lo que con el tiempo fue ganando consenso social.

[…]

Y ahora es cuando cae la tormenta sobre mi.
Amén, Jesús, María y José.
Que Zeus me ampare…